
Ya no miro mapas, ni sigo en mi mismo,
Ya olvido lo que fue mío y no lo encuentro,
Hoy solo me queda ser fugaz cometa semana por semana…
Habló de fusiles y yo de flores multicolores,
Se sintió en la conversación o fue que tenía este delito,
Inevitable defecto que carcome como recordar…
Tres árboles no dejan ver lo que hay para mi,
Y esta maleza entorpece mis pasos,
Solo quería cantarte al oído, como la arena le canta al mar…
Solo las espigas vacías quedan ahora,
Esta trilla no fue buena y las lluvias anuncian que seguirá igual,
Mis ojos se nublan y dejo de esperar la llegada de esa primavera ausente…
La humedad recorre mi mente y se quiebra en mis manos,
Sanamos el dolor pero más nunca la herida,
Las tramos del tren se llevaba el destino y mentimos dentro de nosotros…
El canto de las aves suena a lo lejos,
Como cuerdas de guitarra en mi oído,
La paz llega un intente y la disfruto, le beso y huye…
Desde niño la vi y entre estos sueños,
Renací de su mirada y fallecí entre sus manos,
Nuevo o viejo los soles aun no pueden mostrar su luz...
Soy un simple aguacero que visita tu rostro
Y yo viviré en tus sueños y seré camino que no termina,
Esta flor quedo tan dentro de mí que ya no puedo sacarla, ni salir de ella…
Seré un mar desierto en tus ojos y golondrina de primavera,
Jamás serrare mis ojos para no perderme tu pasar,
Y desgarrado llorare tu ausencia como hoy, ayer y mañana…
Hoy no hago más que cantarte al oído… y tu solo duermes.
Ya olvido lo que fue mío y no lo encuentro,
Hoy solo me queda ser fugaz cometa semana por semana…
Habló de fusiles y yo de flores multicolores,
Se sintió en la conversación o fue que tenía este delito,
Inevitable defecto que carcome como recordar…
Tres árboles no dejan ver lo que hay para mi,
Y esta maleza entorpece mis pasos,
Solo quería cantarte al oído, como la arena le canta al mar…
Solo las espigas vacías quedan ahora,
Esta trilla no fue buena y las lluvias anuncian que seguirá igual,
Mis ojos se nublan y dejo de esperar la llegada de esa primavera ausente…
La humedad recorre mi mente y se quiebra en mis manos,
Sanamos el dolor pero más nunca la herida,
Las tramos del tren se llevaba el destino y mentimos dentro de nosotros…
El canto de las aves suena a lo lejos,
Como cuerdas de guitarra en mi oído,
La paz llega un intente y la disfruto, le beso y huye…
Desde niño la vi y entre estos sueños,
Renací de su mirada y fallecí entre sus manos,
Nuevo o viejo los soles aun no pueden mostrar su luz...
Soy un simple aguacero que visita tu rostro
Y yo viviré en tus sueños y seré camino que no termina,
Esta flor quedo tan dentro de mí que ya no puedo sacarla, ni salir de ella…
Seré un mar desierto en tus ojos y golondrina de primavera,
Jamás serrare mis ojos para no perderme tu pasar,
Y desgarrado llorare tu ausencia como hoy, ayer y mañana…
Hoy no hago más que cantarte al oído… y tu solo duermes.