agosto 10, 2009

Calido día de invierno


Un beso rasante cortó el aire en un suspiro,
miradas faltaron pero tu vista en mis ojos calaba hondo,…
Era día calido de invierno,
como de esos que quedan en la memoria
y marcan la eternidad del instante.
Nos dijimos tantas cosas sin hablarlas,
como columpiando la vida sonreímos las penas que ya no llaman,
y en la odisea de un beso rescatamos el aliento,
ese que te recuerda la bonita idea de vivir la vida.
El silencio nos acompañó,…y nosotros a el,
con la sonrisa mas discreta y el pecho lleno,
tan lleno que en el abrazo de los mil días no falto arrojar un te quiero.