febrero 02, 2009

Dependencia benzodiacepinica


Siento el silencio,… y la angustia en la garganta, de esas que no gustan al tacto, ni verlas regadas. Quizá hoy es día distinto, uno que te arroja al suelo y riega tu cuerpo de dolor; a momentos surco el recuerdo, como buscando el escape mas perfecto o la muerte entreverada que llame a mi puerta, como desde hace tanto espero. Si la vida ya es una lucha perdida, una que nunca ganaremos,… y la vemos pasar, y nos invita a estar, y se lleva los suspiros a cada paso, y nos enreda la vista en negro. Una danza tétrica que nos envuelve y nos guía al más oscuro averno. Me hace pensar,… un día vi a la muerte a los ojos,… me sonrió,… y la bese. La bese tanto que aquí me dejo, como esperando mi turno, ese que nunca llega por que de mi se olvido. Estas líneas pasan, como el agua a una bufanda y la muerte ronda entre angustias; yo aquí la espero sentado, escribiendo estas líneas,… y muriendo canto a su nombre, como ella mi destino.