Ese día no se llevó más que su presencia.
Ninguna cosa puesta en los muros, más que su ropa de la cajonera. Ninguna de las alfombras, ni de la cocina, no faltaba ningún aliño en la alcusa.
No se llevó sus libros, ni su música. Ninguna almohada o cojín. No se llevó nada más que su presencia. no faltaba nada en casa, ninguna cosa,… más que su presencia.