junio 16, 2024
En otro mundo.
En otro mundo, donde nos importamos, done aún conectamos. Te cuento que murió mi
padre, el mundo se puso difícil y tu ausencia costumbre. Se tardo tanto el
invierno que ya de nuevo fue primavera y que las flores del sauce nunca
ocurrieron. El colibrí de ayer ya no volvió más y tu silueta sigue en el rabillo
de mi ojo. Que la tormenta nunca se fue del todo y las ausencias hoy son menos
pero son más hondas. Hoy ya no me dueles, hoy ya no te lloro,… hoy te extraño
tanto, hoy me duele tu voz ausente, tu llamada que no llega, tu brazo en mi
hombro, tu risa de susurro, tu potencia silenciosa, tu guitarra desafinada y tu
risa abrupta. Aquí todo sigue igual, pero con la infinita ausencia de tu
presencia.
marzo 15, 2024
Ecos
Luego de la pérdida, de su ausencia, de lo revuelto del despegue; que con el
tiempo se vuelve cada vez más presente, se invocan los ecos del recuerdo; las
risas, bromas, palabras serias, miradas, que como fantasmas aperesen sobre las
escenas del hoy. Los ecos rebotan en la cabeza y en el cuerpo, en los lugares,
en las sillas, en la ventana. Estremecen la piel, muecas entre risa y llanto,
entre alegria y pena. La pérdida o la ganancia,… la pérdida de tu cuerpo físico
y la ganancia de tu compañía silenciosa. Hoy las historias habitan en mi cabeza,
grabadas como película antigua, con sonidos dentro de un vaso, con partes
borrosas,… sentidas desde lo profundo, con el eco de un salón vacío.
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