
Morir por regresar es vivir en manos del olvido,
dejando besos perdidos y ojos cerrados,
cuando se come del arrebato de mentiras.
Es encerrar el sol y con un cuchillo enterrado en el pecho
ver como se muerde del adiós.
Pero aun puedo tomar tu mano
y ver la luz de tu voz,
aun puedo ver como la vida no deja de girar
y como si fuera por ultima vez te puedo decir: quédate.
dejando besos perdidos y ojos cerrados,
cuando se come del arrebato de mentiras.
Es encerrar el sol y con un cuchillo enterrado en el pecho
ver como se muerde del adiós.
Pero aun puedo tomar tu mano
y ver la luz de tu voz,
aun puedo ver como la vida no deja de girar
y como si fuera por ultima vez te puedo decir: quédate.
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