diciembre 17, 2007

Al comienzo de las letras


El amargo humo se seca en mi boca,
Mientras mis manos no dejan de acariciar las letras,
Dulces y suaves, siempre dispuestas,…
Entonces me vuelco a los versos,
Como si el siguiente fuera el último,
El ultimo de mis últimos,
Más cuando nunca este es ese.

Me revuelco entre recuerdos y ahoras,
Surcando por la mas frágil frontera de la angustia,
Sintiendo que todo esto es un respiro que sobra.
Pero las horas continúan en mis manos,
Tal como lo vi en mi mente desnuda,
Sin dejar espacio al rocío de mis ojos
O a las mas amarillas cartas de primaveras,…


En ocasiones logro ver las nubes que se acercan,
Las que traen la ultima lluvia de mi verano.

Es ahí donde comienzan estas letras,
Es ahí donde este humo sale por mi boca.


Vuelvo mí vista a mis adentros,
Buscando la alucinante idea o lamento,
Entonces me encuentro con ellas,
Esas que hablan de lo que he hecho o he sido,…
Siendo la mitad de toda la carretera,
Sin encrucijadas y siendo lo que sea.
Por que son alegres sin pelar con el recuerdo
Y corriendo por todas mis primaveras,
Tomando lo que algún día dije y aun recuerdo.
Es así lo que digo y hago,
Es así lo que vivo y sueño,
Es una sonrisa esquiva y un amargo trago,…

2 comentarios:

>>Con vista hacia el ocaso dijo...

Aay! que heermoso ^^
me ha sacado una sonrisa

besiitoos!!

Anónimo dijo...

=)